- Jeremías 29:10 NTV “Esto dice el SEÑOR: «Ustedes permanecerán en Babilonia durante setenta años; pero luego vendré y cumpliré todas las cosas buenas que les prometí, y los llevaré de regreso a casa”.
- Esdras 1:1-2 NTV “En el primer año de Ciro, rey de Persia, el SEÑOR cumplió la profecía que había dado por medio de Jeremías. Movió el corazón de Ciro a poner por escrito el siguiente edicto y enviarlo a todo el reino: [2] «Esto dice Ciro, rey de Persia: »»El SEÑOR, Dios del cielo, me ha dado todos los reinos de la tierra. Me encargó construirle un templo en Jerusalén, que está en Judá”.
- Esdras 7:1-6 NTV “Muchos años después, durante el reinado de Artajerjes, rey de Persia, hubo un hombre llamado Esdras. Era hijo de Seraías, hijo de Azarías, hijo de Hilcías, [2] hijo de Salum, hijo de Sadoc, hijo de Ahitob, [3] hijo de Amarías, hijo de Azarías, hijo de Meraiot, [4] hijo de Zeraías, hijo de Uzi, hijo de Buqui, [5] hijo de Abisúa, hijo de Finees, hijo de Eleazar, hijo de Aarón, el sumo sacerdote. [6] Este Esdras era un escriba muy instruido en la ley de Moisés, la cual el SEÑOR, Dios de Israel, había dado al pueblo de Israel. Él subió de Babilonia a Jerusalén, y el rey le dio todo lo que pidió, porque la bondadosa mano del SEÑOR su Dios estaba sobre él”.
Esdras 7:10 (NTV): «Esdras había decidido estudiar y obedecer la ley del Señor y enseñarla a sus decretos y ordenanzas al pueblo de Israel”.
1. Esdras: Hombre de la Palabra
- Era un escriba erudito en la Ley de Moisés.
- Su prioridad era conocer profundamente la Palabra.
- Fue usado por Dios para restaurar la verdad en tiempos de confusión espiritual.
“En un mundo confundido, Dios busca personas comprometidas con Su Palabra”.
2. Esdras: Hombre de obediencia
- No se conformó con el conocimiento; vivía lo que enseñaba.
- Su ejemplo dio credibilidad a su liderazgo.
- Se apartó del pecado del pueblo y clamó en intercesión
- Esdras 9:5-15 NTV “A la hora del sacrificio, me levanté de donde había estado sentado haciendo duelo con mis ropas rasgadas. Caí de rodillas y levanté las manos al SEÑOR mi Dios. [6] Hice la siguiente oración: «Oh Dios mío, estoy totalmente avergonzado; me da vergüenza elevar mi rostro a ti. Pues nuestros pecados se han amontonado tanto que son más altos que nosotros, y nuestra culpa llega a los cielos. [7] Desde el tiempo de nuestros antepasados hasta el día de hoy, hemos vivido sumergidos en el pecado. Por esa razón, nosotros, nuestros reyes y nuestros sacerdotes hemos estado a merced de los reyes paganos de la tierra. Nos han matado, capturado, robado y deshonrado, tal como estamos hoy. [8] »Sin embargo, ahora se nos concedió un breve momento de gracia, porque el SEÑOR nuestro Dios ha permitido que unos cuantos de nosotros sobreviviéramos como un remanente. Él nos ha dado seguridad en este lugar santo. Nuestro Dios nos ha iluminado los ojos y nos ha concedido un poco de alivio de nuestra esclavitud. [9] Pues éramos esclavos pero, en su amor inagotable, nuestro Dios no nos abandonó en nuestra esclavitud. Por el contrario, hizo que los reyes de Persia nos trataran favorablemente. Él nos dio nuevas fuerzas, para que pudiéramos reconstruir el templo de nuestro Dios y reparar las ruinas. Nos dio una muralla de protección en Judá y en Jerusalén. [10] »Ahora, Dios nuestro, ¿qué podemos decir después de semejantes cosas? ¡Pues una vez más hemos abandonado tus mandatos! [11] Tus siervos, los profetas, nos advirtieron cuando dijeron: «La tierra en la que están a punto de entrar y poseer está totalmente contaminada por las prácticas detestables de los pueblos que la habitan. De un
- extremo al otro, la tierra está llena de corrupción. [12] ¡No permitan que sus hijas se casen con los hijos de ellos! ¡No tomen a las hijas de ellos como esposas para sus hijos! Jamás promuevan la paz y la prosperidad para esas naciones. Si ustedes siguen estas instrucciones, serán fuertes y disfrutarán de las buenas cosas que la tierra produce, y dejarán esta prosperidad como herencia a sus hijos para siempre». [13] »Ahora somos castigados por nuestra perversión y nuestra gran culpa; pero en realidad, el castigo que recibimos es mucho menor de lo que merecemos, porque tú, Dios nuestro, has permitido que algunos de nosotros sobreviviéramos como un remanente. [14] Sin embargo, aun así, otra vez estamos quebrantando tus mandatos y nos estamos casando con personas que cometen esos actos detestables. ¿Acaso no será suficiente tu enojo para destruirnos, para que ni aun este pequeño remanente sobreviva? [15] Oh SEÑOR, Dios de Israel, tú eres justo. Nos acercamos a ti con nuestra culpa, sin ser más que un remanente que ha escapado, aunque en semejante condición ninguno de nosotros puede estar en tu presencia»”.
3. Un hombre que regresó el pueblo a Dios:
- Llevó al pueblo al arrepentimiento y restauración.
- Restauró el compromiso con el pacto de Dios.
- Fue usado por Dios para dar dirección espiritual a una generación confundida.
- Esdras 10:1 NTV “Mientras Esdras oraba y hacía esa confesión llorando y postrado rostro en tierra delante del templo de Dios, una gran multitud de Israel hombres, mujeres y niños se congregó y lloró amargamente con él”.
- Esdras 10:10-12 NTV “Entonces Esdras, el sacerdote, se puso de pie y les dijo: Ustedes han cometido un pecado terrible; al casarse con mujeres paganas, han aumentado la culpa de Israel. 11 Por lo tanto, confiesen ahora su pecado al SEÑOR, Dios de sus antepasados, y hagan lo que él exige. Apártense de los habitantes de esta tierra y sepárense de esas mujeres paganas. 12 Entonces toda la asamblea levantó la voz y respondió: ¡Sí, tienes razón; debemos hacer lo que tú dices!”.
“Cuando la Palabra se enseña con integridad, produce transformación”.
¿Estás dispuesto a ser un “Esdras” en tu generación, un Esdras para tu casa, para tu familia?