Las tres instrucciones que Jesús dio a sus discípulos en Mateo 6 (cuando ayunen, cuando oren, cuando den). Hoy hablaremos de: cuando oren.
Las tres instrucciones que Jesús dio a sus discípulos en Mateo 6 (cuando ayunen, cuando oren, cuando den). Hoy hablaremos de: cuando oren.
Continuamos en nuestra serie de inicio de año estudiando las tres instrucciones que Jesús dio a sus discípulos en Mateo 6 (cuando ayunen, cuando oren, cuando den). Hoy hablaremos de: cuando oren.
Ante la solicitud de los discípulos de enséñanos a orar, Jesús dijo:
Mateo 6:9-13 NVI Ustedes deben orar así: “Padre nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu nombre, [10] venga tu reino, hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. [11] Danos hoy nuestro pan cotidiano. [12] Perdónanos nuestras deudas, como también nosotros hemos perdonado a nuestros deudores. [13] Y no nos dejes caer en tentación, sino líbranos del maligno”.
Este modelo de oración tiene dos grandes componentes, el primero que tiene que ver con Dios y el segundo que tiene que ver con nosotros.
En nuestra oración deberíamos:
1. Acercarnos a él como Padre y reconocer la santidad de Dios. Este es un balance crítico, tener la libertad de acercarnos a papá pero a la vez entender su santidad.
Hebreos 4:16 LBLA “Por tanto, acerquémonos con confianza al trono de la gracia para que recibamos misericordia, y hallemos gracia para la ayuda oportuna.”
1 Pedro 1:14-16 NTV “Por lo tanto, vivan como hijos obedientes de Dios. No vuelvan atrás, a su vieja manera de vivir, con el fin de satisfacer sus propios deseos. Antes lo hacían por ignorancia, [15] pero ahora sean santos en todo lo que hagan, tal como Dios, quien los eligió, es santo. [16] Pues las Escrituras dicen: Sean santos, porque yo soy santo.”
2. Pedir que su reino (gobierno) se manifieste en nuestra vida.
¿En que áreas de mi vida no se ha manifestado el gobierno de Dios? Vida espiritual, finanzas, familia, matrimonio, salud, etc.
Juan 21:18 NTV “Te digo la verdad, cuando eras joven, podías hacer lo que querías; te vestías tú mismo e ibas adonde querías ir. Sin embargo, cuando seas viejo, extenderás los brazos, y otros te vestirán y te llevarán adonde no quieras ir.”
3. Rogar que su voluntad se haga en nuestra vida. Rendimos nuestras ideas a su agenda.
Jesús ante la inminencia de la muerte le dijo al Padre: que se haga tu voluntad y no la mía.
Mateo 26:39 LBLA “Y adelantándose un poco, cayó sobre su rostro, orando y diciendo: Padre mío, si es posible, que pase de mí esta copa; pero no sea como yo quiero, sino como tú quieras.”
La segunda parte tiene que ver con nosotros:
1. Pedir por el sustento: Jesús dijo no se preocupen porque van a comer, vestir ni en donde vivir.
Mateo 6:25-26 NVI “Por eso les digo: No se preocupen por su vida, qué comerán o beberán; ni por su cuerpo, cómo se vestirán. ¿No tiene la vida más valor que la comida, y el cuerpo más que la ropa? [26] Fíjense en las aves del cielo: no siembran ni cosechan ni almacenan en graneros; sin embargo, el Padre celestial las alimenta. ¿No valen ustedes mucho más que ellas?”
2. Pedir perdón
Es importante entender que debemos estar a cuentas con Dios, como sus hijos debemos tener un compromiso de cada día ser más parecidos a Jesús por lo tanto crecer en la consciencia de que hay cosas que hacemos que no le agradan.
Lucas 18:13-14 NVI “En cambio, el recaudador de impuestos, que se había quedado a cierta distancia, ni siquiera se atrevía a alzar la vista al cielo, sino que se golpeaba el pecho y decía: “¡Oh Dios, ten compasión de mí, que soy pecador!” [14] »Les digo que este, y no aquel, volvió a su casa justificado ante Dios. Pues todo el que a sí mismo se enaltece será humillado, y el que se humilla será enaltecido».”
3. Pedir protección. El enemigo va a querer dañarnos, el mismo mundo y la carne son nuestros enemigos, pero tenemos un protector que nos guarda.
Lucas 10:19 NVI “Sí, les he dado autoridad a ustedes para pisotear serpientes y escorpiones y vencer todo el poder del enemigo; nada les podrá hacer daño.”
Quiero invitarte a que tomes la decisión de empezar a establecer una vida de oración, mantenerla constantemente o fortalecerla. Tu entornos cambiarán, verás milagros, experimentaras el poder de Dios y su manifestación en tu vida. Te puedo asegurar que no serás la misma persona si incorporas esta práctica en tu vida. Bendice tu familia, orar por tus hijos, desata el poder angelical sobre ti.